dimarts, 30 d’agost del 2011

Vallromanes - Blanes


Hola compañeros, nuevamente el club ha organizado una más de nuestras salidas programadas, esta vez transcurrirá entre Vallromanes y Blanes.

Se había quedado a las 6:30 hora de partida desde la plaza del ayuntamiento, todo presagiaba que sería un día duro, pues el hombre del tiempo había anunciado sol de pleno mes de agosto, gracias que se equivocó, las nubes jugaron a nuestro favor en el tema climatológico.

Nos reunimos puntual mente una cantidad ingente de bikers, en la plaza, nada menos que 32 si no he contado mal. Con unas caritas de sueño que más de uno se hubiera ido a casa a dormir un ratito más. Esta salida cada vez tiene más adeptos y está desplazando a otras salidas míticas en cuestión de poder de convocatoria. (No sé si será la playa, el baño tradicional una vez llegado o …….).

Habían pasado 5 ó 6 minutos de la hora convenida y el pelotón partía hacia su destino.

Comenzamos la salida por can Rabassa en dirección al cruce de coche quemado, (del cual ya no queda ni rastro, pero el nombre del cruce a quedado grabado en nuestro cerebro, por el cual nos orientamos). Allí nos esperaban tres compañeros más que se unieron a nuestro nutrido pelotón y partimos dirección a Órrius.

Allí nos esperaba la primera trialera no muy técnica pero sí que la mayoría aún

deberían estar durmiendo , porque hubo un par de revolcones y más de un susto que puso en firme al grueso.

Sin mas contratiempos proseguimos nuestra marcha en dirección a Cabanyes, un pequeño reagrupamiento y proseguimos nuestro trayecto en dirección a “coll de papers”, una subidita de camino ancho pero que va tirando hacia arriba. Cruzamos la urbanización y llegamos al punto caliente de la jornada, la desviación de la ruta por un camino diferente al utilizado siempre por el Club. Esta variante nos evita subir al santuario del corredor el cual nos hace perder bastante tiempo, (aunque el trayecto es muy bonito, la subida es bastante pastosa y larga.)

Esta variante nos envía por la población de Orrius en dirección a Can Canyamars por unas pistas la mar de divertidas y nada duras respecto al trayecto anterior.

Una vez en Canyamars el grupo decidimos parar para repostar y acopiar fuerzas con nuestros bocatas y bebidas energéticas, además de hacer re agrupación y descansar pues estábamos casi en 1/3 de la ruta


Una vez que habíamos repuesto nuestras energías reanudamos nuestro trayecto en

dirección al coll del Pí de Buac. para más tarde enlazar con el antiguo trazado que nos conducirá a nuestro destino.

Esta desviación, aparte de ser bastante más entretenida y mucho más suave, nos hizo recuperar mucho tiempo respecto al trazado antiguo, por lo cual cuando llegamos al punto de unión de los dos tramos habíamos adelantado casi una hora de tiempo respecto al año pasado.

Una vez en el GR. Seguimos en dirección a Collsacreu, sin más incidentes, en este trayecto hasta llegar a Sant Martí del Montnegre solo la única y vuelvo a repetir la única avería de la jornada, una cadena que dijo basta (por eso somos los TRINXAS ) que se reparo sin más problemas hasta llegar al siguiente reagrupamiento en Sant martí, donde acopiamos agua para llegar hasta el final.

Después de un pequeño descanso que vino de maravilla a más de uno salimos hacia el último obstáculo de la jornada para llegar al coll de can Benett.


Bajada hasta Hort Savinyà y directos sin parar hasta la colina de l´Erola, donde
el año pasado en esta bajada tuvimos todos los percances, ya en dirección a Tordera cruzamos la población y nos dirigimos al rio para seguir su curso por el lateral que nos llevará hasta Blanes (esta variante es más segura y divertida que la que hicimos el año pasado por la carretera y por el carril bici). Con el olor a playa las máquinas del pelotón comenzaron a meter desarrollo a la bici y el ritmo del pelotón comenzó a aumentar de manera considerable,
una vez llegado a Blanes nuestro destino, nos fuimos hacia el paseo para darnos lo que todos estábamos esperando el chapuzón en el mar. Unos más o menos preparados (con bañador o sin él) se fueron metiendo en el agua que por cierto para mi gusto estaba un poco fría, pero que fue de maravilla para relajar los músculos después de una paliza como la de Hoy.

Mientras nos relajábamos se acercaban nuestras azafatas para repartir los premios.


Y empezar lo que ya es tradicional nuestro acopio de energías UNA ENORME PAELLA que nos esperaba para que diéramos parte del gustoso sabor.

Una vez finalizamos la foto de rigor de todos los que cominos el BLANES

Con esto nos despedimos hasta la próxima salida.

L.Lamata





Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada